martes, 26 de julio de 2011

¿Miniaturas Feldkirch? Segunda Parte.

Ya hace tiempo me admiraba de lo oportuna que sería cierta serie de miniaturas, realizadas por los ingleses The Assault Group Miniatures, para representar personajes y escenas de mi ambientación Feldkrich si nos diera la vena wargamer o si nos placiera utilizarlas como marcadores o cosa así. Lo único que deploraba entonces era la ausencia de personajes "civiles" y especialmente femeninos.

Pues bien, parece que los de Pro Gloria Miniatures, empresa radicada en Alemania, han debido leerme... O bien a veces nos imaginamos cosas parecidas. He aquí algunas imágenes de sus figuras...





¿Verdad que es increíble? Diría que incluso han recordado el matiz fantástico de Feldkirch al incluir esa especie de brujo o tal vez actor con máscara de carnero al lado de un sacerdote... Si no fuera porque aún no he otorgado ninguna licencia, en serio...

viernes, 15 de julio de 2011

Sobre la experiencia del Rol.

Hace muy poco, en su Blog Rolequest, el diseñador de juegos Antonio Polo, uno de los escritores de la nueva versión del juego Aquelarre, dedicaba una entrada a hablar de lo que el llama "meta-experiencia", la experiencia de juego que no se mide en puntos sino en desarrollo del personaje. Dónde ha llegado el PJ en su vida imaginaria, qué amigos y enemigos ha hecho en sus periplos, y qué objetivos vitales ha alcanzado, frente a "simplemente" la puntuación de qué habilidades ha podido aumentar en su hoja.

Tal como lo veo yo, la observación de esto segundo permite constatar palpablemente el aprendizaje del personaje, pero en lo primero están enraizados, directamente, los recuerdos que el jugador tiene acerca de "sus" aventuras, acerca de las vivencias de esa otra vida imaginaria que ha llevado su PJ y por la que le ha guiado.

Señala don Antonio que esa "meta-experiencia" es especialmente importante en los juegos realistas, donde la evolución del personaje no se va a plasmar en la consecución de espectaculares poderes mágicos o de habilidades sobrehumanas. Pero además deja abierta una sugerencia acerca de este tipo de juegos...

Recuerda que, a fin de cuentas, con un juego de ese tipo puedes crear una partida tan emocionante como la película Cyrano de Bergerac, mientras que con un Dungeons & Dragons puedes terminar teniendo algo, sin ir más lejos, como la película Dungeons & Dragons. Y tú ya me entiendes...

En efecto, por eso algunos, entre los que me incluyo, no terminamos de disfrutar de la fantasía si no se nos presenta de un modo creíble y completo. Disfrutamos mucho más en un ambiente que, fantástico o no, sea reconocible, y en el que podamos interpretar a PJs con problemas cotidianos, que (por seguir con el ejemplo anterior) pasen por escribir los poemas, enamorarnos de las personas y librar los duelos que en la vida cotidiana no escribiremos, enamoraremos o libraremos... Antes que salvar reinos enteros que no tienen esencia alguna aparte de su aspecto, o acabar con fabulosas bestias que no sólo no son fabulosas sino que se sustentan simplemente en un amasijo de números. Por eso algunos le damos la mayor importancia a una lógica interna y a una coherencia de la ambientación que nos permita "entrar" en ella no sólo como sus espectadores sino como sus habitantes imaginarios, que es lo que son los PJs.

Y, en fin, como aficionado es a lo que ando aspirando con este Blog.

Toma ya.

Todo esto me recuerda a un texto que puede hallarse en la 3ª edición de Ars Magica de Jonathan Tweet y Mark Rein·Hagen, acerca de porqué escogieron el mundo real, en su caso la Edad Media, como base para desarrollar su fantasía (lo que ellos llamaron "Europa Mítica").

• Crecemos con las leyendas de nuestra propia historia y éstas significan mucho para nosotros. Es mucho más fácil estimular a los jugadores con una aventura para despertar al Rey Arturo de su sueño encantado y salvar Inglaterra, que hacerles vibrar con una aventura para encontrar al desaparecido Emperador Khalash y salvar Furdwadia.

• Dos mil años de Historia y leyendas europeas forman un escenario de juego mucho más jugoso que el que pueda aspirar a inventar el más dedicado de los Narradores.

• Como Narradores, constantemente nos esforzamos por hacer que los relatos parezcan lo más reales posible. Un escenario en la Europa Mítica está lleno de gente real, lugares reales y acontecimientos reales cuyos desenlaces tienen un impacto directo en el mundo.

• La realidad supera a la ficción. (...)