¿Hay algo más evocador de un pasado legendario que las antiguas armas blancas, y en especial las espadas? Nos traen a la mente algo sobre el valor y la destreza personales, ideas individualistas acerca de la lucha y del arrojo... Pensamientos románticos, en suma. En realidad, otro motivo más que tuve para comenzar a trazar una ambientación sobre relato gótico-histórico en la época de 1490-1550 y no en otra es precisamente la gran variedad de armas blancas que había en aquellos tiempos, algunas de formas verdaderamente exóticas, que pudieran sólo con su presencia inspirar a algún pacífico jugador a ponerse en la piel de un aguerrido aventurero. De entre estas armas, algunas, como la espada ropera, estaban comenzando prácticamente su andadura, mientras que otras irían con el tiempo desapareciendo de los campos de batalla o al menos haciéndose más raras o de presencia "testimonial" (como las lanzas de caballería y los espadones a dos manos). Así que en aquellos días mientras se experimentaba con nuevas formas de esgrima, que darían pie a futuras y distintas escuelas, aún se practicaban formas que hoy consideraríamos "antiguas" o mejor dicho "medievales".
Valgan estas líneas como introducción a los primeros vídeos que pongo en este Blog. Son de la organización alemana Gladiatores, dedicada a la práctica y recreación de las "Historische Europäische Kampfkünste" (artes marciales históricas europeas), investigadas a partir de viejos manuales, dibujos y textos, y rescatadas del abandono en el que las sumieron primero la esgrima moderna y luego la "deportiva" derivada de esta. En ellos, algunos de sus miembros hacen presentaciones (con movimientos demostrativos y ensayados) de diversas técnicas y armas. Que los disfrutéis, más abajo os aguarda algún comentario más...
Valgan estas líneas como introducción a los primeros vídeos que pongo en este Blog. Son de la organización alemana Gladiatores, dedicada a la práctica y recreación de las "Historische Europäische Kampfkünste" (artes marciales históricas europeas), investigadas a partir de viejos manuales, dibujos y textos, y rescatadas del abandono en el que las sumieron primero la esgrima moderna y luego la "deportiva" derivada de esta. En ellos, algunos de sus miembros hacen presentaciones (con movimientos demostrativos y ensayados) de diversas técnicas y armas. Que los disfrutéis, más abajo os aguarda algún comentario más...
¿Impresionantes, verdad? Si no conocíais estas imágenes (tienen un par de años, a fin de cuentas) y no tenéis noticia de alguna de estas asociaciones, como la Asociación Española de Esgrima Antigua, es posible que os hayan sorprendido. Desde luego y como decía más arriba, se trata de presentaciones y no de "combate libre" (que además sin protecciones sería, lógicamente, peligrosísimo) pero aún así muestran unos encuentros ágiles y dinámicos, muy alejados de los típicos convencionalismos sobre la lucha medieval que, además de estar llenos de falsedades, suelen ser, curiosamente, muy negativos. En la Web de la ya mencionada AEEA podemos leer un completo texto capaz de despejar bastantes dudas acerca de estas reiteradas falsedades y las realidades que ocultan.
Si bien la mayoría de roleros que conozco no me parecen muy entusiastas de liarse a espadazos que digamos, seguro que estas imágenes os resultarán tan inspiradoras de cara a imaginar un lance de espada para vuestra próxima partida como a mí, y espero que nos ayuden a describirlo. Este enlace a las imágenes del famoso Fechtbuch (libro de esgrima) del maestro Joachim Meyer, ofrecido por el Higgings Armoury Sword Guild de Worcester, Massachusetts (USA) nos servirá también para ello. Y especialmente bien en el caso de FUDGE Feldkirch, pues el libro, publicado por primera vez en 1570, muestra las enseñanzas de un maestro que fallecería al año siguiente (1571) dejando constancia de las técnicas y estilos que había conocido y practicado en los años anteriores.
Si bien la mayoría de roleros que conozco no me parecen muy entusiastas de liarse a espadazos que digamos, seguro que estas imágenes os resultarán tan inspiradoras de cara a imaginar un lance de espada para vuestra próxima partida como a mí, y espero que nos ayuden a describirlo. Este enlace a las imágenes del famoso Fechtbuch (libro de esgrima) del maestro Joachim Meyer, ofrecido por el Higgings Armoury Sword Guild de Worcester, Massachusetts (USA) nos servirá también para ello. Y especialmente bien en el caso de FUDGE Feldkirch, pues el libro, publicado por primera vez en 1570, muestra las enseñanzas de un maestro que fallecería al año siguiente (1571) dejando constancia de las técnicas y estilos que había conocido y practicado en los años anteriores.
7 Voces se alzan :
El último vídeo es espectacular y el artículo sobre los mitos de las armas, indispensable. Supongo que estamos muy influidos por lo que hemos visto/leído y la fantasía no siempre es la mejor escuela.
De todas formas los estereotipos a veces siguen ciertas pautas y aportan equilibrio, aunque sea ficticio. El jugador siempre espera que las armas grandes como mandobles o alabardas sean lentas pero potentes, y que las armas ligeras como dagas o estoques pierdan en daño pero ganen en velocidad. Habrá que ver hasta qué punto nos compensa añadir realismo, en detrimento de la jugabilidad.
En cualquier caso, un gran artículo con muy buenas referencias.
Un saludo.
Simplemente genial, rompe con todos los falsos mitos cinematográficos. Muy buen post
Tremendos los videos. En cuanto a lo de la jugabilidad hay que tener en cuenta que estas presentaciones son coreografías y que, ademas, si te da la vida para llevar un mandoble me da a mi que en camiseta no peleas, sino con media Vizcaya encima en forma de malla, placas y coraza (a poder ser). De modo que, si bien no son armas tan torpes como las hemos visto seguro que tampoco te da para andar dando piruetas y sí mamporros, patadas y golpes bajos (que estamos hablando de una pelea no de un concurso).
Como siempre un post muy bien hilado y que hace que cada vez tenga más ganas de probar el juego.
Gracias por vuestros comentarios.
En realidad, en las reglas que están ahora mismo publicadas en FUDGE Feldkirch he intentado recoger lo más posible una visión de la esgrima cercana a esta: Por ejemplo, los mandobles no son armas pesadas sino de esgrima, pueden efectuar paradas, etc... Por otro lado, he intentado también dar a entender que para usar algunas armas hace falta mucho espacio y, de esa manera, en las distancias cortas un arma con un Factor de Daño muy elevado puede, simplemente, ser inútil por no poder utilizarse.
Seguramente, en cualquier caso, me quede mucho por pulir. Mi intención, como he procurado dejar claro, es que el combate sea muy "narrativo", y hacia ello me gustaría dirigirlo.
Hrundi V. Bakshi, paciencia, a ver si pronto podemos jugar una partida algo más completa que aquella anterior, con algún combate animado (hay jugadores que ya sabéis a lo que venís) y más digna de llamarse "del juego".
Gran entrada con un tema tan caro a los narradores/jugadores de rol como es la esgrima y sus usos. Si bien yo me reconozco devoto de las escuelas españolas con Carranza y Pacheco, o de las italianas con Capo Ferro, Agrippa o Bonetti, esta nueva visión no hace si no enriquecer mis posibles escenas de lucha. Un bravo para este blog tan lansquenetero ;)
Mi caro amigo Luis, en estos momentos regreso, autobús mediante, desde la Sala de Armas "Jerónimo Sánchez de Carranza", encuadrada en la AEEA, mi Sala de referencia. Llevo en la saca a Flaminia, mi ya baqueteada espada de mano y media de anillas, una réplica de modelos del periodo central del siglo XVI, y la satisfacción de haberme embarcado en un par de horas de lances y espadazos sin coreografía ni zarandajas -protecciones, eso si, que no falten- al hilo de los cuales me he preguntado, no pocas veces, como encajar una experiencia tan compleja en las reglas de un JdR. Mirando a ojo de águila las reglas que hay en tu web se me ocurren varias precisiones, que espero podamos comentar copa en mano a no mucho tardar, pero en general me parece que vas bien encaminado en algo que, cuanto más sé, más difícil me parece. Abrazos!
Paco E.
Espero, mi buen Paco, que nos dejen tomarnos la copa en paz y no tengamos que hacer uso de esa toledana... Por lo demás, a ver si es cierto. Y gracias de nuevo por vuestros comentarios...
Publicar un comentario