jueves, 10 de febrero de 2011

El círculo de los espías (02).

Mensajes ocultos.
Para hacer llegar sus mensajes los espías se ven obligados, como es lógico, a camuflarlos frente a posibles robos o registros. La intención es que pasen desapercibidos ante el más concienzudo escrutinio, pero para ello el agente debe usar todo el ingenio e imaginación posibles y recurrir a fórmulas inesperadas. Existen algunos ejemplos clásicos, como el que Heródoto narra en su "Historia" sobre un espía del rey Demarato de Esparta, que escondió el mensaje a entregar cubriendo con cera la superficie de la tablilla en la que estaba escrita, o alguna rara historia sobre mensajes tatuados en el cráneo del portador que, cuando volvía a crecer el cabello, quedaban ocultos. Sin embargo, por ser muy conocidos y citados, es posible que de querer utilizarlos fracasen estrepitosamente... O, quien sabe, funcionen por lo inesperado, quedando los mensajes por así decir ocultos a plena vista.

Algunos procedimientos más modernos implican la fabricación de tintas especiales, como aquellas que se muestran sólo cuando la carta con ellas escrita es sometida al calor o a la luz, o a una sustancia determinada que reaccione con la tinta, lo cual es más difícil de descubrir y por tanto algo más fiable.

Una versión más complicada es la de aquel compuesto tan sutil que se filtra en la cáscara de un huevo cocido, permitiendo que al escribir sobre ella el mensaje desaparezca y se fije en la clara, quedando inscrito en ella y guardado por el más insospechado de los recipientes. Ni que decir tiene que, para realizar estas mezclas, son precisos ciertos conocimientos de magia natural...

La esteganografía.
En cualquier caso, el riesgo de que un agente rival encuentre el mensaje pese al ocultamiento es muy real, así que también suele recurrirse a cifrar su contenido, es decir, a escribirlo usando un código interno sólo inteligible por quien tenga su clave. Algunos de estos códigos, como aquel que usaba Julio César, meramente sustituyen cada letra por otra, siempre la misma. Otros añaden algo de complejidad usando símbolos secretos, desconocidos para quien no esté en el asunto, en lugar de la escritura habitual: Un ejemplo sería el Alphabetum Kaldeorum, mencionado al hablar de cierta famosa inscripción hallada en Viena, en esta entrada. Otra posibilidad es escribir un mensaje aparentemente común o incluso sin mucho sentido al que, aplicándole encima determinada plantilla que tapa o deja al descubierto algunos de los caracteres, revele un texto inserto en el otro. De esta plantilla, en forma de rejilla o de lámina agujereada en metal (o en humilde papel o pergamino) deben tener, como es lógico, una copia tanto quien escribe el mensaje como su receptor.

Ciertos sabios de los últimos tiempos destacan por su aplicación al desarrollo y estudio de estos códigos secretos, como el padre Leon Battista Alberti (1404-1472), humanista que fue secretario de tres papas, y sobre todo el abate Johann von Heidenberg, llamado Johannes Tritemius (1462-1516). Interesado desde muy joven en las artes ocultas, Tritemius se ha dedicado a diseñar códigos que permitan la transmisión segura de mensajes comprometedores, basándose en sus amplios conocimientos de cábala y aritmosofía. Volcó el resultado de su trabajo en sus obras Steganographia, similar a un grimorio, terminada en 1499, y Polygraphia, escrita más o menos al tiempo y aparecida 1518. Ni que decir tiene que estas obras no fueron dadas inmediatamente a la imprenta y que permanecen sólo parcialmente conocidas, pues sus contenidos permiten guardar los más delicados secretos. La esteganografía por él pensada establece reglas para la sustitución de letras, además de otras fórmulas con las que complicar los posibles intentos de descifre de los mensajes, y se refiere a otros sistemas ajenos, que pueden enriquecer el propio. Tan completo fue el éxito de Tritemius en este campo, que fundó verdadera escuela y que sus sistemas se siguieron utilizando hasta mucho más tarde por quien los conociera, como puede verse en el siguiente párrafo...

Enrique IV la utilizó en sus cartas a Mauricio, landgrave de Hesse, en las que incluía largos pasajes de cifras del siguiente tenor: "Pero mi querido primo, como tenéis 44, 99, 26, 143215... Os ruego que empleéis a los que sean paralelamente 86, 2753, 19..."
Sarane Alexandrian, "Historia de la Filosofía Oculta".

Mensajes secretos y el sistema de FUDGE Feldkirch.
¿Cómo trasladar todo este asunto al sistema de tiradas? Una partida en la que se incluya como parte importante mensajes secretos tendrá seguramente por protagonistas a PJs muy interesados en el tema, así que es necesario un sistema que rija la manera de cifrar y descifrar mensajes. Hay dos posibilidades: Una, utilizar las Habilidades Luces/Inteligencia o Investigación (u otra que pueda considerarse oportuna de la lista ya publicada, que puede consultarse en esta entrada), o bien incluir una Habilidad "Esteganografía", si la partida va a estar verdaderamente centrada en el tema.

Debe considerarse en cualquier caso que la Dificultad para que los PJs descifren un mensaje encontrado o interceptado puede ser variable, y de hecho dependerá de la "necesidad" narrativa de que los PJs lo puedan desentrañar solos y sin ayuda o no, pues a fin de cuentas puede utilizarse el asunto como motor de una historia y no sólo como una dificultad añadida a la trama.

Si el caso es el segundo y se quiere que los PJs puedan cifrar y descifrar mensajes por su cuenta con libertad, existe una posibilidad que puede complicar el sistema mínimamente, pero que puede merecer la pena: Al escribir un mensaje en clave, un personaje (PJ o PNJ) deberá hacer dos tiradas, la primera de Investigación y la segunda de aquella Habilidad en la que esté basada la clave que utilice, a definir entre jugador y DJ entre algún Idioma (incluído el Latín), Alquimia, Cábala, Ciencias, Hermética o Teología. El resultado de ambas tiradas se apuntará.

Si un personaje recibe el mensaje y conoce la clave tardará un rato en descifrarlo, pero podrá hacerlo sin tirada alguna. Si por el contrario el mensaje cae en manos de un PJ o PNJ que intenta desentrañar su contenido por cuenta propia, deberá repetir las dos tiradas que hizo el escritor, debiendo igualarlas para conseguirlo, si bien con un matiz importante: El DJ le indicará que tire por la segunda Habilidad sin permitir al jugador saber, de entrada, por cual está tirando.

Es decir, que el PJ buscará, además de un orden o repetición que le ayude a entender el código, unos términos o motivos que le ayuden a traducirlo, sin saber cuáles pueden ser estos últimos. ¿Nombres angélicos? ¿Símbolos alquímicos? ¿Palabras en algún idioma ajeno, o por el contrario combinaciones de letras más o menos aleatorias que fingen serlo?

Si se utiliza una Habilidad Esteganografía, se utilizará para sustituir estas tiradas, siendo necesario realizar sólo una tirada para poner en clave un mensaje o para traducirlo.

Un círculo de espías.
Algunos PNJs que pueden formar parte de esa organización.

· El descifrador. (PNJ).
Intelectual perteneciente al cuerpo de la Universidad local, de mentalidad humanista y gran interés por el conocimiento, este profesor se considera también idealistamente fiel a su república (o a su príncipe), así que tras saber que su lealtad y habilidad habían llamado la atención del Maestro Espía del país, inmediatamente aceptó ponerse a su servicio. Es quien dirige el pequeño grupo que lleva a cabo el cifrado o descifrado de los mensajes que han de salir de la cabeza de la organización, o llegar hasta ella y, debido a su discreción y a su poca personalidad, la última persona en quien nadie sospecharía.

Personalidad: Dependiente, Discreto. Objetivos: Agradar mediante su trabajo.

Empatía Mediocre, Cultura local (lugar de la partida) Mediocre, Fortaleza Mediocre, Fuerza de Voluntad Buena, Nadar Pobre, Orientación Mediocre, Redaños Normal, Sigilo Normal, Trepar Pobre.

Agudeza/Percepción Mediocre, Atractivo/Carisma Mediocre, Dineros Normal, Diplomacia Normal, Elocuencia Mediocre, Etiqueta Normal, Falsificar Muy Bueno, Investigación Muy Bueno, Luces/Inteligencia Normal, Subterfugio Bueno.

Latín Excepcional, Alquimia Mediocre, Cábala Normal, Ciencias Muy Bueno, Hermética Bueno, Teología Normal.

Ventajas: Leer y Escribir, evidentemente. Desventajas: Secreto (Es un espía).

Equipo: Ropas dignas, un puñal (no sabe utilizarlo), una camisa acolchada (que se pondría, oculta, sólo en caso de que su vida estuviera en peligro), un bastón de paseo, libros de consulta, escritorio completamente equipado, bolsa de terciopelo con 70 reales de plata.

· El agente de campo experimentado (PNJ).
Reclutado entre los peores asesinos a sueldo de las Italias por el ejército imperial, este peligroso agente no está adscrito a ninguna bandera ni regimiento, sino que se mueve de una ciudad a otra, de un reino a otro, según le ordenen y siempre solo, despreciado por los soldados que deban saber quién es (lo cual no implica conocer su verdadera identidad) tanto como por los superiores que le recompensan. Es un maestro del ocultamiento y el disfraz y un experto eliminador, empleado en labores tales como investigar por su cuenta algún asunto delicado, interceptar un mensaje secreto o acabar con un espía enemigo. Puede ser uno de los más desagradables antagonistas que se encuentren los PJs, quienes deberían llegar a odiarle.

Personalidad: Profesional, sádico. Objetivos: Cumplir su misión y desaparecer.

Habilidades: Empatía Normal, Esquivar Normal, Cultura de Milán Bueno, Fortaleza Normal, Fuerza de Voluntad Normal, Nadar Mediocre, Orientación Normal, Redaños Normal, Sigilo Muy Bueno, Trepar Muy Bueno.

Acrobacias Muy Bueno, Agudeza/Percepción Bueno, Atractivo/Carisma Mediocre, Cabalgar Mediocre, Callejeo Normal, Cerrajería Normal, Cultura local (lugar de la partida) Mediocre, Dineros Mediocre, Intimidación Bueno, Investigación Muy Bueno, Lanzar Muy Bueno, Luces/Inteligencia Normal, Robar Normal, Subterfugio Muy Bueno, Táctica Mediocre, Tortura Normal.
Idiomas: Castellano, Francés, Alemán, todos Normal. Friulano y Veneciano, ambos Mediocre.

Ballesta Normal, Cuchillos Excepcional, Pelea Bueno.

Ventajas: Leer y Escribir.

Combate:
Factor de Daño y Resistencia: 0
Dagas (lleva 2): +2 (Total +2), Estilete: +1(Total +1).
Ropa acolchada: F de Resistencia +1 (Total +1).

Equipo inicial: Ropas humildes, capa, ganzúas, garfio con 20 metros de cuerda.

· Abate Tritemius (PNJ).
Si la historia tiene lugar antes de 1516, los PJs tendrán acaso posibilidad de conocerle. Miembro en su juventud de una sociedad secreta iniciática, la Sodalitas Celtica, Johann von Heidenberg fue aceptado en el monasterio benedictino de Sponheim, cercano a su ciudad natal de Trittenheim, a la que le debe su sobrenombre. Elegido abad al año siguiente, se entregó con denuedo a imponer el orden en aquella casa, que halló empobrecida, y al cabo de unos años su gestión la había restaurado completamente. Mientras se preocupaba porque los hermanos recuperaran su labor de copia de manuscritos, él continuaba sus estudios en todos los campos del ocultismo, y desarrollaba una preocupación especial por la aritmosofía, y con ella por la lógica, las cifras y el lenguaje.

No pasaron sus estudios desapercibidos, ya que recibía la visita tanto de sabios como de curiosos, algunos de los cuales extendieron imprudentemente el rumor de la maestría en la magia de Tritemius, lo que le valió, incluso, ser convocado por el emperador Maximiliano. Éste le sometió a una prueba que determinara su posible herejía o su inocencia, prueba que superó con bien... Pasando a ser uno de los mayores colaboradores del Emperador en materia de criptografía y espionaje y, según se rumorea, en un consejero en temas ocultos, merced a alguna demostración privada de sus poderes sobrenaturales. El mismo año su política en la abadía le causó algunos problemas con los hermanos, por lo que fue nombrado prior del monasterio de San Jacobo de Würzburg, transladándose allí a continuar sus estudios.

Con el paso de los años, el abate Tritemius se ha ido volviendo más elusivo y solitario, y ha alcanzado una gran erudición. Es autor de libros de teología como el Liber Octo Cuestionum en el que explica las preguntas de fe a las que fue sometido por el Emperador, o el De Septem Secundieis sobre las inteligencias angélicas (en unos términos que el experto en la Habilidad Hermética sabrá relacionar con la tracidión gnóstica), pero también de una gran obra no publicada, Antipalus Maleficorum Comprehensus, en la que condena la Magia Negra y diserta en profundidad sobre las distintas vertientes de la ciencia oculta. Por supuesto, continúa resolviendo dudas relacionadas con la esteganografía y actuando como consejero en tales materias, motivo por el cual no sería raro que los PJs debieran hacerle alguna visita, en caracter de consultores...

Personalidad: Autoritario, Comprensivo, Solitario.
Pasiones: Magia, Estudio.
Objetivos: Conocimiento metafísico y ocultista, Salvación de su alma.
Habilidades principales: El abate Tritemio tiene un conocimiento Excepcional del Latín, la Cábala, las Ciencias y la Hermética, así como Muy Bueno de las Habilidades Investigación y Teología, y Bueno de la Alquimia. Es un hombre ceñudo y a veces intransigente, aunque tolerante con las ideas y abierto de miras, que conoce bien el alma humana. Por lo demás, es un clérigo sedentario, con algo de sobrepeso y no muy buena salud, y parece algo mayor de lo que es.

Y a todo esto...
...Ahora que lo pienso, una idea vuelve a mí continuamente. ¿Seguirá existiendo el Ajedrez Mágico? ¿Y de ser así, en manos de quién estará?

viernes, 4 de febrero de 2011

El círculo de los espías (01).

Los poderosos del Renacimiento se esfuerzan en conocer al enemigo. El espionaje de los recursos de cualquier fuerza de Europa por parte de sus rivales es un hecho.

Una trama relacionada con el espionaje puede dar pie a argumentos rocambolescos, llenos de misterio, y con ello a partidas verdaderamente divertidas. Sin embargo, y al menos en este caso, deberíamos tratar de evitar que se conviertan en una traslación de determinados clichés propios del siglo XX a otro ambiente histórico, recurso facilón y discutible en el que se basan algunas ficciones actuales. Los lugares comunes a transitar deberían ser en cualquier caso los de la intriga a lo Dumas antes que los gadgets ingeniosos o los macarras metidos a gentlemen de la década de 1960, que caen en lo paródico con facilidad.

Reinos, ligas y repúblicas.
Hay que señalar que, pese a que el espionaje como tal haya existido durante toda la Historia, no existen en torno a ello costumbres ni estructuras cerradas (como las de los servicios secretos estatales del siglo XX, que es imposible no tengamos en mente al referirnos al tema). Ni siquiera es habitual que muchos Estados tengan embajadas permanentes en territorio vecino, cuanto menos una red de espías igualmente "permanente".

Sólo en ocasiones, pues, los círculos de espionaje serán fieles a Estados en sí. En este caso, que es el de España o Francia, los representantes diplomáticos no sólo representan los intereses de su patria cultivando la amistad con cortesanos y monarcas, sino que también mantienen sus propias redes de informadores que les mantienen al tanto de asuntos a los que oficialmente no deberían tener acceso. Además pueden, si es necesario, dar cobijo en el palacio de sus embajadas a agentes recién llegados, sean informadores, mensajeros... O asesinos.

Otros de estos círculos, de organización muy similar, estarán al servicio directo de monarcas antes que al de Estados, como es el caso de los espías del Papa, que pueden tener la misión de actuar contra algún arisco feudatario de su amo, pero dentro de los límites del dominio de éste. O bien, incluso, serán fieles a una facción influyente que no se corresponda exactamente con un Estado, como un pacto entre familias nobles poderosas con mano en varias repúblicas italianas, o una liga de gobernantes del Sacro Imperio, como la de Esmalcalda. El poder de estas facciones no debe ser subestimado, teniendo el alcance que tienen, aunque es posible que en algunos casos sus servicios de espionaje sean poco más que un grupo de informadores con más carácter de conjura ocasional o de sociedad secreta que otra cosa.

Objetivos del espía.

—¿Qué hacéis en esta ciudad?
—Hago de espía —respondió lisa y llanamente el capitán—. El señor de Estrosse me ha encargado de una misión secreta relativa a unos asuntos en Toscana: El hecho es que se le van los ojos detrás de Siena, no se consuela de estar exiliado de Florencia y espera recuperar algún día el terreno perdido. (...) Da lo mismo jugar a esto que al tarot de Bohemia.
Marguerite Yourcenar, "Opus Nigrum".

¿Qué busca un espía, y dónde lo busca? Sus objetivos son, en general, siempre los mismos: Conseguir conocimientos sobre la potencia rival de aquella a la que tiene lealtad y, en concreto, aquellos a los que no se puede acceder abiertamente, por estar relacionados con las fuerzas y las flaquezas que sería necesario poder ponderar con exactitud o aprovechar en caso de la ruptura de las hostilidades. Pese a lo que pueda parecer, esto no incluye sólo el estado de las defensas militares, sino también la confianza o descontento de los súbditos hacia su gobierno, la presencia o no de sociedades secretas, la producción y manufactura comercial y las infraestructuras oficiales como puertos y caminos.

Por si esto no fuera lo suficientemente amplio, debe tenerse en cuenta que el espía siempre está actuando contra el servicio de inteligencia del país en el que se halla, ya que no sólo es un objetivo conseguir información, sino también evitar que descubran que la ha conseguido (y si es posible, que ni siquiera descubran su presencia) y contra cualquier espía de una tercera potencia que pueda moverse en el mismo escenario (ya que también es un objetivo evitar, en lo posible, que otros cuenten con las mismas ventajas que uno).

Maestros Espías.
Evidentemente, este de "Maestro Espía" no es un título oficial: Se aplica a algunos poderosos, generalmente por parte de sus enemigos y con desprecio... Si bien sería difícil encontrar una mejor definición de la labor que cumplen esos cortesanos.

Podríamos llamar Maestro al líder en cada momento de un círculo determinado de espías. En el caso de un grupo al servicio de una nación, actuará como tal algún ministro o alguien de plena confianza del monarca, pero menos visible... O incluso el propio soberano, si no considera a nadie digno de manejar sus secretos. En cualquier caso, sus mejores enviados (como los mismos embajadores) están capacitados para dedicarle informes ocultos tras lenguajes indescifrables y códigos secretos sobre los asuntos que hayan podido investigar, y hacérselos llegar por cauces secretos.

Menciono dos ejemplos históricos de hombres que bien pudieran haber sido llamados Maestros Espías, el inglés Sir Francis Walsingham (1532 - 1590) y el castellano Don Bernardino de Mendoza (1540 - 1604), que aunque operaron en una época ligeramente posterior a la que nos ocupa, dan buena idea del espionaje en su siglo. El primero, siendo ex-embajador de Inglaterra en Francia, llegó a ser secretario de la reina Elizabeth I y se especializó en el control interno del reino, lo que incluyó desbaratar varios intentos de asesinato contra su soberana. El segundo, caballero de Santiago, se dedicó a lo opuesto: Apoyar y alentar conjuras y tramas pro-españolas en Inglaterra, donde fue embajador, siendo finalmente expulsado del país. Enviado a Francia con el mismo cometido, su embajada se convirtió en sede de numerosas conspiraciones y cuartel general del espionaje internacional católico en general y español en particular.

El actor Geoffrey Rush como Sir Francis Walsingham
en "Elizabeth II: The Golden Age" (S. Kapur, 2007).

¿Y si el Maestro Espía es un desconocido, alguien cuyo verdadero cargo todo el mundo ignora? Esta opción es verdaderamente interesante: Puede que ese desconocido sea quien menos se espera, literalmente, incluso que dé sus órdenes e indicaciones por escrito o a través de otro personaje, imposibilitando el descubrimiento de su identidad.

Informadores y agentes de campo.

No sucedió muy a menudo en la última guerra en la que él estuvo que tuviera que participar en hechos de armas, como ya se acostumbraba a hacer, porque en estos tiempos es costumbre proceder, sobre todo, con intrigas y engaños políticos.
Ermanno Olmi, guión de "El Oficio de las Armas".

Un círculo de espías estará compuesto por un número variable de ellos, que ni siquiera tienen porqué conocer a todos los miembros del grupo, coordinados a través de algún contacto local como estarán... La mayoría serán personas de cualquier clase o condición, con trabajos normales a tiempo completo, incluso con personalidades y aún rasgos fáciles de olvidar y muy comunes. Sólo en algunos momentos se les requerirá para informar o para algún encargo delicado, según sus habilidades. Sólo ante la necesidad de realizar alguna misión especial se enviará uno o varios agentes de campo, generalmente militares con los conocimientos o instrucción adecuados y podrá contar con los espías locales de su círculo para informarle o respaldarle.

Casos especiales constituirían los de personas que estén siendo útiles a alguna conjura (e incluso labrando seguramente su propia desgracia sin saberlo) como Constance de "Los Tres Mosqueteros" de Alejandro Dumas, o que sean obligados a participar en ella de un modo u otro, como el ex-sacerdote convertido en asesino "prescindible" que aparece en el cómic "El Escorpión" de Stephen Desberg y Enrico Marini, por poner un par de ejemplos de ficción.

martes, 1 de febrero de 2011

Águilas, perros y caballos.

(...) Una jauría cuyos perros sólo cedían la palma a la raza gris del Rey, denominada casta real, caballerizas llenas de corceles árabes procedentes de África, Turquía y España, alcándaras bien provistas de gerifaltes y halcones de gran precio, regalados al duque por Solimán y demás príncipes infieles, a cuyos países llegara su alta nombradía.
A. Dumas, "El Paje del Duque de Saboya".

Algunos animales son de presencia inexcusable en la leyenda y la aventura: Sin su caballo, a gran parte de los héroes parecería que les falta una parte de ellos mismos.

Los animales que aparecen a continuación han sido descritos (entre otros, salvajes o domésticos) de cara a las reglas en la primerísima versión del reglamento de FUDGE Feldkirch. Con su tamaño mayor o menor que el del hombre, he entendido que eran un buen lugar para introducir las reglas sobre Escalas de FUDGE. No obstante, les he hecho algunos retoques que necesitan probarse, por lo que deben considerarse provisionales todas las referencias a las reglas. Como siempre, se agradecerá cualquier sugerencia o comentario...

Aves rapaces y cetrería.

Habiendo sido la cetrería durante siglos un arte nobiliar y una práctica cuyo aprendizaje era parte de la educación del caballero, es comprensible que en el Renacimiento siga siendo muy valorada por los más altos estamentos de la sociedad. Incluso existen al respecto algunas alambicadas tradiciones, que suelen cumplirse sólo en parte, como aquella que marca las aves rapaces que puede utilizar, según su puesto en la jerarquía cortesana, cada noble (y que está recogida en el "Booke of St. Albans" de Julia Berners, publicado en 1486). Sin embargo, en esta época puede decirse que la cetrería no está de moda, en especial en las Españas, y aunque la caza siga siendo una ocupación propia de la aristocracia, sólo algunos aficionados de entre ésta (entre los cuales se cuentan algunos monarcas, eso sí) la mantienen en práctica. Incluso tiene sus detractores: En su "Diálogo del Pescador y el Cazador", de 1539, el aragonés Fernando Basurto aprovecha la oportunidad de atacar a la práctica de la cetrería mientras alaba las bondades y desentraña los secretos de la pesca... Y, en otro orden de cosas, tanto los reformadores religiosos primero como la Contrarreforma después se plantearán la moralidad de esta actividad, como, ciertamente, la de casi todo lo demás.

Entre el pueblo, eso sí, la cetrería no tiene gran predicamento, pese a que no haya leyes que la veden a los plebeyos. Simplemente, mantener a las aves rapaces en cautividad es caro, y quien quiere o debe cazar se dedica a ello por medios más humildes, que van desde el tiro con ballesta hasta las trampas y cepos. Si alguno se dedica a la cetrería lo hace profesionalmente, adiestrando halcones, cuidándolos y poniéndose en general al servicio de algún noble.

Para los curiosos, y por si diera ideas para partidas (¿"A quién puede pertenecer este ave perdida?") anoto la jerarquía nobiliar de las aves rapaces según la dama Julia Berners: Un sirviente puede llevar un cernícalo, un eclesiástico un gavilán, una dama un esmerejón, un hidalgo o escudero un halcón borní, un terrateniente un azor, un caballero el pesado halcón sacre y los nobles con título diversas especies de halcones, pero el macho (llamado tercel por los ingleses y tiercelet por los franceses), más pequeño y valioso, se suele reservar a los príncipes. Los reyes pueden llevar el halcón gerifalte, y sólo el Emperador puede cazar con un águila real.

Y si algún PJ quiere saber a quién pertenecía esa "ave perdida" de antes, debería ser necesario superar una tirada a Dificultad Normal de Cetrería o Muy Difícil de Etiqueta... Además de dar con un cazador tradicionalista o un DJ especialmente romántico.

• Ave Rapaz (Distintos tipos).

Águila.
Acrobacias Bueno, Agudeza/Percepción Muy Bueno, Esquivar Bueno, Fortaleza Normal, Intimidación Normal, Orientación Bueno, Pelea Normal, Rastrear/Cazar Muy Bueno, Redaños Normal.
Combate: Factor de Daño y Factor de Resistencia 0.
Movimiento: 1 metro/turno de combate andando, 20 m/turno volando.

Halcón.
Acrobacias Muy Bueno, Agudeza/Percepción Excepcional, Esquivar Bueno, Fortaleza Normal (Escala -1), Intimidación Mediocre, Orientación Bueno, Pelea Normal, Rastrear/Cazar Muy Bueno, Redaños Normal.
Combate: Factor de Daño y Factor de Resistencia -1.
Movimiento: 1 metro/turno de combate andando, 25 m/turno volando.

Perros de una u otra clase.

Poco necesita decirse sobre los perros como animales domésticos, pues la presencia de estos aliados del hombre a su lado es inmemorial. Cuadros, dibujos y relatos nos permiten apreciar galgos o perros pastores muy reconocibles como ejemplares de esas razas, además de lujosos y pequeños falderos o grandes mastines de caza de variedades antecedentes, aunque no exactamente iguales, de las actuales.

Por ejemplo, algunas damas de alta alcurnia podrán ser vistas con pequeños perros de aguas, limpios y peinados, liberados de su función original como perros de caza, pero el caniche como hoy lo conocemos aún no existe (ni la "original" peluquería a la que se les somete hoy). En cuanto a razas de caza hoy desaparecidas, cabe destacar el talbot, sabueso procedente de Normandía y muy apreciado en Inglaterra, una criatura fuerte, enérgica y de corto pelaje blanco como la nieve, ya mencionado aquí. El Rey de Francia cuenta con otros famosos perros de caza, llamados a veces familiarmente "la raza gris del Rey", una especie de línea de sangre propia de grandes perros de montaña procedentes de los Pirineos navarros.

Algunos grandes molosos no sólo acompañan a sus amos en el arte venatoria sino también en la guerra. En las Españas, la Mesta usa para proteger a sus ganados mastines de tierras de León o de Asturias capaces de matar a un lobo con pocos problemas, que acompañan a veces a los ejércitos. Llevan el cuello protegido con collares de gruesas puntas tanto al rastrear alimañas como al rastrear hombres o, en el segundo caso, incluso con protecciones más originales, como se vió aquí.

• Perro (Distintos tipos).
Perro de caza.
Agudeza/Percepción Muy Bueno (Se guía por el olfato), Empatía Bueno, Esquivar Normal, Fortaleza Mediocre, Intimidación Mediocre, Nadar Mediocre, Orientación Muy Bueno, Pelea Normal, Rastrear/Cazar Muy Bueno, Redaños Mediocre, Sigilo Mediocre.
Combate: Factor de Daño y Factor de Resistencia -1.
Movimiento: 7 m/turno, 25 m/turno corriendo.

Mastín.
Agudeza/Percepción Bueno (Se guía por el olfato), Empatía Bueno, Esquivar Normal, Fortaleza Normal, Intimidación Muy Bueno, Nadar Mediocre, Orientación Bueno, Pelea Bueno, Rastrear/Cazar Bueno, Redaños Muy Bueno, Sigilo Mediocre.
Combate: Factor de Daño y Factor de Resistencia 0.
Movimiento: 7 m/turno, 25 m/turno corriendo.

Aunque no debería ser habitual que un animal que se enzarza en un combate con un PJ lo haga "a muerte", una de las desgraciadas excepciones podría ser precisamente uno de estos mastines: Los que son dedicados a la guerra no pueden ser más sanguinarios, e incluso, como sucede en las Indias Occidentales, algunos conocen bien el sabor de la carne humana, pues allí los aventureros más crueles en ocasiones conceden tan horrible alimento a los perros a fin de que, al atacar a los indígenas, sean implacables...

El más noble animal.

Al igual que sucede con el perro, el origen de la relación entre caballo y ser humano se pierde en la noche de los tiempos. El caballo es, por su relación entre fuerza, resistencia y relativa inteligencia, el más valioso de los animales domésticos. Desgraciadamente, tanto es así que en una sociedad cruel que puede poner precio a las personas un caballo es más valioso que la mayoría de ellas. Las propias palabras castellanas "caballero" y "caballería" dejan clara la relación entre la nobleza y la posesión y "uso" de estos animales, y el símbolo de poder y riqueza que son. En cualquier caso, aunque los caballos sean valiosos no todos son un artículo de lujo, pues muchos son los simples pencos de monta o de carga por cada rocín señorial. Y aún más comunes para menesteres de trabajo son las mulas y burros, con los que organizar reatas y caravanas.

En general, podemos considerar los caballos como de monta, de tiro o de guerra. Entre los dos primeros contaríamos cualquier caballo apto para tal fin, siendo más comunes las yeguas, o los machos capones, por su mansedumbre para las labores cotidianas. Incluso los viajeros que puedan permitirse moverse a caballo o los jinetes ligeros de los ejércitos (exploradores, mensajeros, etc...) los preferirán. Por cierto, que puede encontrarse más información sobre viajes a caballo en esta entrada. En cuanto a los caballos de tiro, puede señalarse que entre ellos se encuentran las razas de mayor tamaño y fuerza, especialmente resistentes al trabajo duro y capaces de arrastrar grandes pesos, pero de carrera menos ágil y veloz que la de sus congéneres. Los caballos de trabajo procedentes de la Normandía (antepasados de los actuales percherones) tienen fama por estas características.

En cuanto al que aquí llamamos caballo de guerra, un animal de raza escasa y valiosísima, que sólo pueden permitirse aquellos nobles que van a participar en la guerra como caballeros pesados, conocido generalmente como destrero. Se trata de corceles grandes y pesados, tanto como un caballo de tiro medio, lo que les permite cargar con el peso de las protecciones que quiera ponérseles y de de un caballero con toda su armadura pesada. Al mismo tiempo, son tan ágiles y veloces como cualquier caballo de monta. Se suelen elegir de entre algunas razas concretas (como la de Frisia), prefiriéndose los sementales más bravos y sólo obedientes a los mejores jinetes, y se les entrena para que no teman ni el fragor de la batalla, ni el estampido de los disparos y la artillería, ni la visión de la sangre.

Un caso aparte es el de los animales que aquí llamamos de raza, caballos especiales para cuya crianza se elige cuidadosamente qué cruces hacer y entre qué ejemplares, obteniendo ciertas características: Serán especialmente ágiles, rápidos e incluso hermosos. Estos corceles podrán ser tanto bravas monturas de caballería ligera como obedientes palafrenes dedicados al paseo de las damas de alta alcurnia o de los príncipes y reyes. Muchas veces tienen una especial inteligencia que les permite aprender diversos tipos de pasos y saludos o posturas de exhibición para los que son domados, así como en general obedecer a su jinete a la menor orden. Tienen fama como buenas razas de caballos los árabes y los españoles. De estos últimos cabe señalar el esfuerzo que están realizando sus amos por cruzarlos con otras razas europeas, como los frisones antes mencionados, a fin de conseguir nuevas y valiosas variedades.

• Caballo (Distintos tipos).
Caballo de Monta.
Agudeza/Percepción Mediocre, Empatía Mediocre, Esquivar Mediocre, Fortaleza Normal (+2 de Escala), Intimidación Mediocre, Nadar Mediocre, Orientación Normal, Pelea Normal, Redaños Mediocre.
Combate: Factor de Daño +2 (Coz) o 0 (Mordisco). Factor de Resistencia 0.
Movimiento: 10 metros/turno de combate andando, 35 m/turno corriendo.

Caballo de Guerra.
Agudeza/Percepción Mediocre, Empatía Normal, Esquivar Normal, Fortaleza Muy Bueno (+2 de Escala), Intimidación Normal, Nadar Mediocre, Orientación Normal, Pelea Bueno, Redaños Normal.
Combate: Factor de Daño +4 (Coz) o +1 (Mordisco). Factor de Resistencia +2.
Movimiento: 10 metros/turno de combate andando, 35 m/turno corriendo.

Caballo de Raza.
Como el caballo de monta, pero tiene Empatía Normal, Fortaleza Bueno (+2 de Escala), el Factor de Daño de su coz es +3 y su movimiento corriendo es de 40 m/turno.

Caballo de Tiro.
Como el caballo de monta, pero tiene Fortaleza Muy Bueno (+2 de Escala), el Factor de Daño de su coz es +4, su Factor de Resistencia +2 y su movimiento corriendo es de 30 m/turno.

Mula.
Agudeza/Percepción Mediocre, Empatía Mediocre, Esquivar Mediocre, Fortaleza Bueno (+2 de Escala), Fuerza de Voluntad (O, más bien, algo parecido) Bueno, Nadar Mediocre, Orientación Mediocre, Pelea Normal, Redaños Mediocre.
Combate: Factor de Daño +3 (Coz) o +1 (Mordisco). Factor de Resistencia +2.
Movimiento: 8 m/turno andando, 25 m/turno corriendo.

Pony.
Como la mula, pero su modificador por Escala es de +1, su Habilidad de Pelea Mediocre y su Factor de Daño es de +2 en el caso de la coz y 0 en el caso del mordisco.